Como todo, este
blog que me ha acompañado durante mis primeras experiencias universitarias
llega a su fin. Con este blog, además de estas experiencias, también han
acompañado muchas sensaciones.
En un principio
no sabía muy bien como llevarlo, ni cómo hacerlo, era un nuevo reto para mí. A
pesar de vivir en el siglo XXI, tengo que admitir que no soy muy amiga de las
tecnologías, soy más de papel y boli, es decir “a la antigua usanza”. Enseguida
me pongo nerviosa cuando se me abren ventanas y ventanas, pero ha merecido la
pena porque he aprendido muchas cosas y he visto que no era tan difícil como yo
pensaba.
Por otra parte,
me encanta escribir, soy consciente de que no soy una gran escritora pero me
gusta poder transmitir mis pensamientos tras unas letras. Aunque en este caso
no haya sido un trabajo libre total, en el sentido de tener que escribir
ciertas palabras, no me ha supuesto ningún problema, es más, en ocasiones he
tenido que ajustarme por no pasarme demasiado.
Con la entrada
que más he disfrutado es con la de “Solo es el principio”. No sé si será la que
mejor está o no, pero es la que más me ha gustado y con la que me he sentido
más a gusto. Me pareció una película increíble que aporta muchas cosas y todas
ellas me sorprenden, creo entender que es más larga, me gustaría poder verla en
un futuro próximo. Por eso me gustaría que se leyera esa en concreto, la
escribí con más ganas que las demás, y no hubiera acabado de lo mucho que me
llamo la atención.
Una vez dicho
esto, creo que ya es hora de ir cerrando. Cuando creé este blog tuve que
analizar estructuras, tipos de letras, imágenes, el nombre... Lullaby, creo que
no podría haber estado más acertada, una canción de cuna. Las canciones de cuna
se cantan hasta que el niño o la niña se duermen. En este caso, la asignatura Función Docente, ya llega a su fin, ya
se ha dormido, y con ella, Lullaby, toca dejar de cantar.
Goodbye,
Lullaby.
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